jueves, 18 de septiembre de 2008

Un ángel y un amigo

Un ángel no nos escoge, Dios nos lo asigna.
Un amigo nos toma de la mano y nos acerca a Dios.
Un ángel tiene la obligación de cuidarnos.
Un amigo nos cuida por amor.
Un ángel te ayuda evitando que tengas problemas.
Un amigo te ayuda a resolverlos.
Un ángel te ve sufrir, sin poderte abrazar.
Un amigo te abraza, porque no quiere verte sufrir.
Un ángel te ve sonreír y observa tus alegrías.
Un amigo te hace sonreír y te hace parte de sus alegrías.
Un ángel sabe cuando necesitas que alguien te escuche.
Un amigo te escucha, sin decirle que lo necesitas.
Un ángel, en realidad es parte de tus sueños.
Un amigo, comparte y lucha por que tus sueños,sean una realidad
Un ángel quiere ser tu amigo.
Un amigo, sin proponérselo, también es tu Ángel
Rubén Chocobar

PARA QUERERTE A TI

Para quererte a ti
no hace falta la luna
no hace falta el rocíon
i siquiera la lluvia
Para quererte a ti
no hay mas explicaciones
que el saber tu existir
sin contar las razones
para quererte a ti
no hay que pedir verdades
no hay que buscar mentiras
ni siquiera hay que hablarte
Para quererte a ti
no hay que invocar las musas
me basta con mirarte
me sobra con saberte
Y por quererte a ti
se me escapan las dudas
se van alzando el vuelo
para no volver nunca
Y por si fuera poco
no importa la distancia
ni el por que ni el cuando
para quererte a ti.
Rubén Chocobar

PARA QUERERTE A TI

Para quererte a ti
no hace falta la luna
no hace falta el rocíon
i siquiera la lluvia
Para quererte a ti
no hay mas explicaciones
que el saber tu existir
sin contar las razones
para quererte a ti
no hay que pedir verdades
no hay que buscar mentiras
ni siquiera hay que hablarte
Para quererte a ti
no hay que invocar las musas
me basta con mirarte
me sobra con saberte
Y por quererte a ti
se me escapan las dudas
se van alzando el vuelo
para no volver nunca
Y por si fuera poco
no importa la distancia
ni el por que ni el cuando
para quererte a ti.
Rubén Chocobar

SOMOS UNO

El romance de la noche se cierne sobre nosotros,
Amor mío dame tu boca, tus ojos, tus manos,
Quiero fundirme en ti en la oscuridad divina,
Quiero olvidar que somos dos.

Testigos de nuestra pasión serán las palomas dormidas,
Las luciérnagas bailarinas alumbraran el camino,
Déjate llevar vida mía, deja te llevar por mis huellas
El mundo nos espera con los brazos abiertos.
Rubén Chocobar